domingo, 8 de noviembre de 2015
Reflexiones Invernales I
Volvamos a una de las cuestiones básicas del pensamiento nihilista, emancipado,
abandonado. Aquello tan temible que ha suscitado la construcción de la gran
caverna metafísica, religión y casi toda la filosofía. Y es el hecho de que
estamos condenados a una existencia efímera, gratuita, y por ende
contradictoria en sus vaivenes de placer y adversidad. Absurda empresa es la
vida. Inviernos y primaveras imbricadas, abundancia y frugalidad en toda contingencia.
¿Qué es más importante, nacer o morir? Una chispa en la oscuridad, al desaparecer
regresa al mismo lugar del que surgió, la inexistencia, y ni siquiera
pertenecemos a ella por la oposición de aquello que los filósofos llaman el
Ser. Podríamos aventurarnos en los postulados de la escuela eléata para hallar
una respuesta pero caeríamos en una trampa lógica
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por comentar